miércoles, 30 de julio de 2014

Volví, y fui millones... de quejas

No es sencillo volver a escribir.

No, para nada. Sin embargo, hay cosas que te hacen motivar, sensaciones que te mueven y regeneran en vos esa adicción por plasmar en algún lado, de una manera bonita, las cosas que te están pasando.

Una de esas sensaciones, es el PROFUNDO ODIO

Y ahora que, después de casi dos años, vuelvo a trabajar en una biblio, haciendo lo que me gusta, en un ambiente apacible, vuelve a nacer en mi ese sentimiento de facepalm que te producen los usuarios.

A partir del día de la fecha, presento el nuevo Dramatis Personae:

  • Mrs. Netbook: la señora que viene a abusar de la internet y nada más
  • La Genetista: la chica que viene a estudiar genética en horario laboral
  • Mr. Creepy: el tipo que es raro y me mira fijo
  • Pipina
  • Cast a confirmar
Los primeros tres son usuarios, los demás... ya se van a dar cuenta.

El día de la fecha los voy a deleitar con una, aunque no la primera, anécdota acerca de Mrs. Netbook.

Mañana normal en la biblioteca. Sin calefacción, y temperaturas de 5ºC. Pipina trae al hijo a hacer los deberes de matemática.
MN: Buen díiiiiaaaaaaaaaaaaaaaa!
Mel: Buen día.
MN (notando que la mesa donde se suele sentar está ocupada): Ah, me sacaron el lugar.
Mel: Sí, está el chico haciendo deberes.
MN (se acerca hasta el pibe): Me sacaste el lugar. ¿Qué tenés enchufado? (ve el caloventor) Ah... la calefacción... (se acerca nuevamente a mi) ¿ES TU HIJO?
Mel: No
MN: Ah... porque tiene enchufado un caloventor
Mel: Sí, se lo di yo, hace mucho frío acá adentro.
MN: ¿Y va a venir todos los días?
Mel: No sé.
Nene (en voz bajita desde el fondo) No creo...
MN: Pero no hay otro enchufe.
Mel: ¿No tenés batería en la notebook?
MN: No
Mel: Allá hay un enchufe de dos patitas.
MN: No me sirve, ¿No la puedo enchufar ahí? (señala la zapatilla donde está enchufada mi PC)
Mel: No, no se puede enchufar más nada porque puede recalentar. Si querés me fijo si hay un adaptador para aquel enchufe.
MN (sin mirarme): O sea que me estás diciendo que me tengo que ir.
Mel: No, si quiere le busco un adaptador.
MN: ¡NO! ¡Mirá si se me quema! (Con enojo) Dejá, ya me voy a arreglar sola. Chau.
Mel: Buen día, hasta luego.

Reflexión: "Con todo respeto a la señora que viene todos los días únicamente a usar Internet:
Si hoy el enchufe está ocupado, no es mi culpa.
Si usted no tiene batería, tampoco es mi culpa.
Y no entiendo cómo enchufarla en la zapatilla en la que ya hay una PC es más seguro que usar un adaptador.
Y no, no le estoy diciendo que no se puede quedar, le estoy ofreciendo una solución que a usted no le gusta, nada más.

Extrañaba el trabajo de biblioteca, pero no a la gente loca.


1 comentario:

  1. Ahhh... ayer estaba a punto de volver a mi blog, pero a contar las anécdotas de secretaria...
    Tranqui Mel, la gente loca abunda
    Me encanta volver a leerteeeeeeeeeeeeeeeeeeee

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